En México, millones de trabajadores y jubilados cuentan con la cobertura del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Es un derecho ganado que ofrece una red de seguridad social completa: cubre consultas, especialidades, cirugías, medicamentos e incluso pensiones por invalidez o cesantía.
Sin embargo, esta cobertura universal se enfrenta a una realidad frustrante. Según encuestas de satisfacción y reportes de la CONAMED, las quejas más grandes de los derechohabientes son: tiempos de espera que superan los 60 días para una consulta de especialidad, saturación en las salas de urgencias y listas de espera para cirugías programadas que pueden superar los 6 meses.
Esto genera la gran pregunta para muchos adultos mayores y sus familias: Si ya tengo IMSS, ¿estoy tirando el dinero al pagar un seguro médico privado?
La respuesta corta es: no, si valoras tu tiempo y la capacidad de elegir. No se trata de reemplazar al IMSS (eso sería un error financiero), sino de crear un sistema inteligente donde el seguro privado actúa como un “acceso rápido” (fast pass) para cuando más lo necesitas.
¿Tienes IMSS pero estás cansado de las largas esperas para especialistas?¡Cotiza un plan complementario! Koltin y Care60 están diseñados para adultos mayores.

Para tomar una decisión, hay que entender qué te da (y qué no te da) cada opción.
El IMSS es tu red de seguridad social integral. Sus ventajas son incomparables:
El principal problema del IMSS no es su cobertura, sino su servicio y saturación. El precio que pagas es en tiempo y comodidad:
Aquí es donde el seguro privado justifica su costo. Lo que compras no es cobertura (ya tienes la del IMSS), sino Agilidad, Elección y Servicio.
Renunciar al IMSS es un grave error. Perderías tu derecho a pensión, a incapacidades y a la única red que te cubrirá tus enfermedades crónicas sin costo.
La estrategia más inteligente es usar ambos sistemas:
Usa el IMSS como tu base (para lo crónico, preexistente y caro) y usa el Seguro Privado para la agilidad y las cirugías programadas.
¿Cómo funciona esto en la práctica?
Para un adulto mayor, no todos los seguros privados son iguales. Así se comparan:
| Característica | IMSS (Público) | Seguro GMM Tradicional (Privado) | Plan Complementario (Koltin/Care60) |
|---|---|---|---|
| Costo (Prima) | Gratuito (Derechohabiencia) | Muy Alto (para 65+ años) | Moderado (Diseñado para 60+) |
| Cubre Preexistencias | ✅ Sí, siempre. | ❌ No. Las excluye de por vida por contrato. | ⚠️ Sí (Padecimientos controlados como diabetes o hipertensión suelen aceptarse tras evaluación). |
| Tiempo de Espera (Especialista) | Muy Largo (Semanas/Meses) | Inmediato (Días) | Inmediato (Días) |
| Tiempo de Espera (Cirugía) | Muy Largo (Meses/Años) | Rápido (Días/Semanas) | Rápido (Días/Semanas) |
| Beneficios Económicos | ✅ Sí (Pensión, incapacidad). | ❌ No | ❌ No |
| Ideal para… | Tratamientos crónicos, preexistencias, pensiones. | Emergencias (si se contrató joven y sano). | Complementar al IMSS, agilidad, cirugías. |
Esta es la pregunta clave. Si tienes más de 60 años y ya tienes IMSS, un seguro de gastos médicos mayores tradicional (GMM) es, en la mayoría de los casos, una pésima inversión.
Sí, vale la pena pagar un seguro privado SI eliges el correcto.
Pagar un seguro privado no es renunciar al IMSS; es comprar tiempo y calidad de vida. Es una inversión para no tener que esperar 6 meses con dolor para una prótesis de rodilla, o para no perder la vista esperando una cirugía de cataratas.
La estrategia financiera y de salud más inteligente para un adulto mayor en México es combinar la cobertura social total del IMSS (para pensiones y preexistencias) con la agilidad de un plan complementario diseñado para ti.
Sí, son totalmente independientes y legales. Puedes ser derechohabiente del IMSS y tener tu póliza privada. Tú decides cuál usar en cada situación.
Generalmente no. La mayoría de los seguros privados solo cubren medicamentos que se administran durante una hospitalización. Los medicamentos de seguimiento (recetas) casi nunca están cubiertos.
Si tienes un seguro privado, ve a un hospital privado de tu red. La atención en urgencias será mucho más rápida y eficiente que en una sala de urgencias del IMSS, que suele estar saturada.
Sí. Si te diste de baja, puedes inscribirte en la Modalidad 40 (Continuación Voluntaria) para seguir sumando semanas para tu pensión. Sin embargo, la Modalidad 40 no incluye servicios médicos, por lo que necesitarías contratar un seguro de salud privado o la Modalidad 33 del IMSS.
¿TIENES PREGUNTAS?