Los Coronavirus son virus causantes de síndromes respiratorios que van desde un cuadro leve , como el resfriado común, hasta enfermedades más graves, como el nuevo COVID-19. Algunos coronavirus que infectan a los animales evolucionan de tal manera que son capaces de transmitirse a las personas, y éstas a su vez, contagiar de persona a persona. El COVID-19 es una nueva cepa de coronavirus de la cuál aún no se conoce mucho, por lo que apenas se comienza a trabajar en una Vacuna y Tratamiento de COVID-19.
Los Coronavirus se llaman así por la forma de las espigas en su superficie. Aún no se conoce con certeza el tiempo en el que el COVID-19 puede permanecer en la superficies contaminadas, por lo que se recomienda la limpieza y desinfección constante de todas las superficies además del lavado frecuente de las manos, después de tocarse nariz, boca y ojos.
El COVID-19, al ser una enfermedad causada por una nueva cepa de Coronavirus, es aún poco conocida en varios aspectos. Al no conocerse completamente el mecanismo de acción del virus se desconoce también la forma de tratar la enfermedad. Es por ello que aún NO EXISTE medicamento para curar el Coronavirus NI Vacuna para prevenir el contagio. El tratamiento actual se concentra en aliviar los síntomas que provoca. En la mayoría de los casos la enfermedad no es grave y el cuerpo la controla en alrededor de dos semanas.
Actualmente científicos de todo el mundo se encuentran en una carrera contrarreloj para encontrar una vacuna. Se estima que por lo menos tardará un año, antes que dicha vacuna esté lista para su aprobación, sea aprobada y se pueda producir en cantidades suficientes para su distribución.
Dado que no existe vacuna para prevenir la enfermedad, se deben conocer los mecanismos de contagio los cuales pueden ser a través de:
Los principales síntomas del COVID-19, y también los más frecuentes, son:
Para prevenir el contagio por COVID-19 se requiere tomar medidas generales de limpieza:
A nivel mundial se están realizando ensayos clínicos con diferentes fármacos para encontrar el tratamiento más adecuado para el COVID-19. En México, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (COFEPRIS) aprobó tres de cinco protocolos de investigación: remdesivir, hidroxicloroquina y tocilizumab.
Para poder realizarse los ensayos de investigación, los especialistas deben entregar un protocolo y someterlo a un comité de ética y bioseguridad en la COFEPRIS, para garantizar que el ensayo no dañará la salud de los pacientes. En México se realizarán cinco ensayos clínicos con diversos medicamentos:
El fosfato de Cloroquina es utilizado para reducir los síntomas de artritis reumatoide y apara tratar condiciones como Lupus Eritematoso Sistémico, Esclerodermia, Liquen plano, Polimiositis y Sarcoidosis. El uso de la Cloroquina únicamente está autorizado en el tratamiento de la malaria y en algunas enfermedades autoinmunes como las antes mencionadas.
En estudios anteriores, se ha reconocido el efecto antiviral frente al SARS-CoV1. Razón por la cual se ha propuesto y utilizado en varios ensayos para tratar el reciente COVID-19. Actualmente se están llevando a cabo ensayos clínicos alrededor del mundo, sobre su efecto en personas contagiadas por COVID-19. Estos estudios aún se encuentran en proceso, por lo que NO HAY GARANTÍA de su efectividad en el tratamiento contra la enfermedad por COVID-19.
En un estudio realizado en Francia con 42 pacientes de COVID-19, 14 fueron tratados con hidroxicloroquina sola, 6 con hidroxicloroquina y azitromicina. Se obtuvo que a los seis días del tratamiento la carga viral en secreciones nasofaríngeas disminuyó. Sin embargo, este estudio no puede ser concluyente debido a que 6 pacientes se retiraron del análisis por interrupción del tratamiento y de ellos, tres pacientes fueron trasladados a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), uno falleció y dos decidieron no continuar con el estudio.
Este estudio realizado no debe considerarse como concluyente debido a sus limitaciones: escaso número de pacientes, diseño del estudio, heterogeneidad de los síntomas y no se informa sobre los resultados clínicos. No obstante, sí hay registros de los efectos secundarios de la cloroquina en el organismo humano. Por lo que se recomienda, mientras no exista una aprobación por parte de la COFEPRIS, tomar cloroquina sin ser recetado por un médico con experiencia en tratamientos con la misma.
El fosfato de cloroquina puede ocasionar reacciones alérgicas potencialmente mortales e interactuar con otros medicamentos que la persona esté tomando, ya sea por prescripción o automedicación. Algunos medicamentos que interactúan con ella son paracetamol, cimetidina, productos elaborados a base de hierro, isoniazida, caolín, metotrexato, niacina, vitaminas y productos herbolarios.
Dado que la Cloroquina se metaboliza en el hígado no debe ser consumido por personas con alteraciones hepáticas, que tenga recetado otros medicamento que también sean metabolizados por el hígado o personas que consuman grandes cantidades de alcohol. En todo caso, el médico que lo receta debe valorar riesgos contra beneficios de su uso.
Algunos de los efectos secundarios comunes de la cloroquina, aún siendo recetado por el médico especialista son:
Algunos síntomas secundarios a su consumo, menos frecuentes pero que pueden llegar a ser potencialmente mortales algunos de ellos son:
A las pocas horas de la intoxicación se presenta hipotensión arterial grave, Shock cardiogénico, es decir la incapacidad del corazón para bombear sangre suficiente a los órganos para su funcionamiento, arritmia ventricular y apnea. En la mayoría de las intoxicaciones por cloroquina, los primeros síntomas en aparecer son de carácter neurológicos como visión borrosa, disminución de conciencia y convulsiones. Otros síntomas comunes de la intoxicación por cloroquina son las náuseas y los vómitos.
Sin embargo, los síntomas que determinan la gravedad de la intoxicación son los síntomas cardíacos como hipotensión arterial y fallo de la bomba cardíaca. Actualmente no existe un antídoto eficaz para tratar la intoxicación por cloroquina, sin embargo, el tratamiento suele ser sintomático, junto con la administración de carbón activado y lavado gástrico.
Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) Es una Institución de Gobierno Federal dedicada a brindar servicios de salud y seguridad social a la población con afiliación al Instituto. En el puedes encontrar GeriatrIMSS que proporciona atención integral al adulto mayor mediante atención especializada.
Visitas Médicas Domiciliarias. Son un apoyo que ofrece el IMSS a sus beneficiarios cuando no pueden asistir a una consulta en la clínica.
Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE) Es una Institución de Gobierno Federal dedicada a ofrecer asistencia en casos de invalidez, vejez, riesgos de trabajo y muerte para los trabajadores del Gobierno Federal.
Instituto Nacional de Geriatría (INGER). Promueve el envejecimiento saludable de la población por medio de la producción de nuevos conocimientos, difusión y su utilización. En él podrás encontrar información y servicios desde la prevención, rehabilitación y paliación de los adultos mayores.
Instituto Nacional de las Personas Adultas Mayores (INAPAM) Es un Organismo Público Descentralizado cuyo objetivo es garantizar el bienestar del adulto mayor. En el puedes encontrar Centros de Atención Integral en donde se brinda a las personas de la tercera edad servicios médicos multidisciplinarios especializados en el primer nivel de atención.
Adultos mayores serán los primeros en recibir vacuna para COVID
Coronavirus minuto a minuto. Deutsche Welle.
Medidas de seguridad sanitaria. Gobierno Federal
Advertencia de la EMA sobre la cloroquina e hidroxicloroquina. El Médico interactivo
Intoxicación aguda por cloroquina, potencialmente letal. Medicina Intensiva
COVID-19: Cloroquina e Hidroxicloroquina. CADIME